En México, se estima que a diario mueren alrededor de 117 personas como consecuencia del tabaquismo. Pese a ello, la población fumadora se ha incrementado en años recientes, especialmente entre adolescentes y mujeres. El tabaquismo continúa siendo un grave problema de salud pública, ya que ocasiona diversas enfermedades que representan un alto costo en salud para el gobierno. La recaudación por impuestos al tabaco nunca ha sido suficiente para cubrir dicho costo económico. El aumento en los impuestos al tabaco es la mejor vía para que los fumadores reduzcan su consumo y, al mismo tiempo, el gobierno cuente con los recursos necesarios para solventar una mayor parte del gasto total en atención médica.